Trabajo en equipo– En psicoterapia usted y el profesional trabajan juntos para conseguir los objetivos propuestos. Mientras que usted es el experto de su propia vida, el profesional escucha y proporciona las herramientas para lograr esos objetivos. Los dos tienen un papel importante en este proceso y es fundamental que se dé un compromiso por ambas partes para que el trabajo funcione.

Acceso a los cuidados de salud – Creo que el aspecto económico no debería ser obstáculo para que alguien pueda recibir cuidados de salud. Intento que mis tarifas sean asequibles, pero entiendo que las circunstancias de cada persona son únicas y que un tratamiento de psicoterapia implica un gasto semanal considerable, por ello estoy dispuesta a escuchar las necesidades y posibilidades de cada persona. No permitas que sea el dinero el que limite tu camino. Hablemos para buscar una solución.

Transparencia – Un cambio interior duradero necesita tiempo para producirse. Las soluciones mágicas e inmediatas no existen. La psicoterapia es trabajo y es un proceso que necesita tu presencia activa.

Respeto – Las relaciones sanas se basan en el respeto y no pueden existir sin este. Las acciones hablan más fuerte que las palabras.

Crecimiento personal – Cada persona posee potencial para cambiar y mejorar. Aunque quizás no lo creas, tú también tienes fortalezas. Este proceso te ayudará a identificarlas y aprovecharlas para impulsar tu crecimiento personal.

Autonomía– si consideramos la psicoterapia como un proceso para liberarnos de ataduras que nos hemos impuesto, es lógico pensar que este proceso no debería imponer nuevas ataduras. La terapia no debe crear dependencia. Creo que la función del terapeuta es asistir al cliente en conseguir sus objetivos y mejorar su libertad de elección; ayudarle a avanzar hacia una autonomía personal a través de herramientas que promuevan la auto reflexión y un cambio autodirigido en el menor tiempo necesario.  

Naturaleza – La Naturaleza es nuestra principal fuente de bienestar; nuestro mejor maestro, y esencial para nuestra vida.

La investigación en este campo está aportando nuevos modos, muy prometedores, de trabajar para mejorar nuestra salud mental.

Cuerpo-mente (enfoque integral) – Cuerpo y mente aun tienden a ser disociados hoy en dia. Sin embargo, como seres humanos estamos constituidos por ambos, necesitamos ambos, sufrimos y disfrutamos gracias a ambos. Integrar y experimentar cuerpo y mente enriquecería nuestras experiencias y nos ayudaría a resolver algunos de los aspectos que afectan a nuestro funcionamiento. Muchas veces nuestro cuerpo nos da señales que reflejan conflictos emocionales. Prestar atención a estas puede abrir canales para resolver dificultades por eso integro en nuestro trabajo la atención a tus sensaciones física, lo que tu cuerpo está expresando es, a menudo, señales de aspectos que a los que las palabras aun no tienen acceso.

Que la fuerza te acompañe